miércoles, 14 de octubre de 2015

Incoherencia en bucle de alma y cabeza.

Mataria por dejar de ser tan orgullosa aunque sea un rato, pero cada vez que aparto mi orgullo por alguien me destruye. Asi que he decidido que ni tanto ni tan poco. Si vas a estar dispuesto o dispuesta a entrar en mi mundo no intentes jugar conmigo porque vas a salir por la misma puerta por la que has entrado, pero si decides quedarte puedes conocer todas las caras de la luna. Pero con cuidado. Sigo siendo letal, corrosiva, venenosa, infecciosa o como quieras decirlo. Pero joder, no olvides que quiero como nada, doy por los demas lo que no esta en los escritos y me encanta dar amor (solo cuando es recíproco) y cuando no también, que coño. 
De cualquier manera, que la gente siga pensando que soy fria y distante me alegra, porque asusta. En consecuencia, solo los y las valientes van a querer adentrarse en mi vida y conocer cada rinconcito de mi alma. Pero sigo siendo peligro. Que genial que lo peligroso suela gustar o al menos dar curiosidad (como el botón rojo de los ascensores y de las alarmas de incendio). Asi que de una puta vez decide si te arriesgas a ver mi alma o no porque me estoy cansando, de ser orgullosa y cariñosa, de ser fría y puro fuego. De dar por ti tanto y ni recibir un saludo. Llamame ahora egoísta también pero que a estas alturas me da igual. Ahora soy gris, ni blanco ni negro, gris.

No hay comentarios:

Publicar un comentario